martes, 12 de enero de 2021

Pies

Me dirijo a mis pies

al macrocosmos de los pies, lo grande

infinito adentro.

Fundamento y rudimentario tacto del cascaron rugoso de las plantas, 

surcos y grietas de la semilla magnética que crece, 

es la forma del tiempo, la ilusión del movimiento

un rastro libre por seguir siendo solo un momento y coordenada

la estrella que se agita.

Uñas, huesos y tendones fueron formados iterativamente, carne, piel y sangre; 

cuanta creación en acción todo el tiempo

tejiendo libertad

intento escuchar su música al bailar, 

peso aquí y allá en las orillas, en la unidad de sus fuerzas, 

desdoblándose los dedos se arriesgan a volar

uno adelante y otro atrás, ellos saben, lo saben todo

han sostenido al mundo, han soñado el sueño del árbol enraizado por vivir y bañarse al sol

orgullosos de sanarse solos, sus heridas

tejiendo libertad.




sábado, 26 de diciembre de 2020

Venado y León


Carne blanda en cada cambio de peso medular

huesos despejados, hombros aislados

la visión del león en un árido campo es dorada

como el pelaje, como la sombra erguida que avanza al horizonte.

Hay dos versiones en el paisaje de la bestia

tenso o relajado, en el dominio o el ataque

ahí reside, la perfección oscilante

enfoca y desenfoca, y en sus comisuras

el elixir de la eterna juventud.

El león siempre ha sido viejo e inocente

en sus fauces redime al sacrificado.

La presa se alimenta del intento,

de la astucia de la posibilidad,

y del poder de alimentar y ejercitar al enemigo

y quizá vencer...

bajo el rojizo crepuscular del hambre acumulada

las dos bestias rondan un mismo destino

a nadie pertenece la victoria del ejercicio

donde no hay orgullo que saciar

sino perseverar en el camino 

de huesos y carne organizada.

 



jueves, 22 de noviembre de 2018

a quién he llamado sino a todos y cada uno,
encendiendo altares en la imaginación
ofreciendo un silencio y un canto
una cuerda que se quiere afinar cantando
por estar con todos celebrando
todos los vuelos que hemos realizado
y todos los milagros que hemos sido y seguiremos siendo
cada enjambre místico, una partícula del ser.

y lloro sino río
me desequilibra el mero concepto de la ausencia,
la dualidad, el terror

frágil y extático es ser humano
por eso vamos de la mañana  a la noche
curtiendo en la repetición,
blandiendo el corazón
que es lo único que ser tan prodigioso puede blandir

a quién he de llamar sino a Dios que emana
de cada exhalación, mirada, tacto y agitación de alas
todo este asunto es entre tu y yo

domingo, 12 de agosto de 2018

creímos y no del todo,
al menos no en todos los mundos,
en esa ficción que no obstante
se formó con el fundamento
pero tan quieto equilibrio
tan frágil se compensa dentro del fuego
Hoy envejecimos un segundo
lagrimeando
desintoxicando la verdad
lo que se tiene que quedar
y lo demás en las sales se reintegra a los mares
Esta continuidad que nos traga y nos devuelve al ser
al que queremos arrebatarle segundos de felicidad, de plenitud
como si la olvidáramos, como si no fuera pleno siempre
que se purifique el alma en ese momento de credulidad
de hundimiento en el regocijo de todo lo que es posible ser
estar entero en un lugar con otro,
con aquello que se materializa y siento fuera de mi
cuando no hay hay un fuera de sí
Pero queríamos amar como se aman los dioses
engendrando placeres para repoblar el mundo
y que para ser fieles al amor haya que soltar
y en otra dimensión no te suelto nunca
tu eres yo, yo soy tu, te tengo cerca
y a veces hasta muero en el incendio de tu calidez
y me salgo sin camisa para tomar el aire
para que todo Dios me temple
Si los suicidas acechan
igual amamos,
sólo hay una sustancia en la sangre mercurial
su forma es su mensaje


lunes, 25 de junio de 2018

podría decir, en un afán de apagar esta luz dudosa, esta luz intermitente que extermina las paredes, la certeza alegre como un devenir de mares golpeando rocas, siendo más que un ente salvaje y  una verdad permanente, que entre la presencia y la ausencia se abre un abismo, y ahí todo es vértigo, y caballos levantando el polvo, y nubes que filtran la luz y hacen sombras, y me da miedo, y siento que caigo, y me pregunto, ¿qué es esto de ser y no ser contigo? observo los patrones, mido el tiempo y las formas en que se manifiesta y trato de no ser vencido, por el pensamiento, por el olvido y el deseo y tus manos, y me digo que jamás podrías ser ruin, que siempre serás amor absoluto.

sábado, 2 de junio de 2018

Quien te nombra te allana
y caminas adelantado a tu tiempo
invencible
como la eternidad que se mira y se nombra en un lenguaje desconocido
el secreto a voces...
uno que se olvida, porque lo único desconocido es el sentido.
Por nombrarte con palabras se te oculta
codificar con signos lo que se escapa entre las sombras
ahí detrás de donde me distraigo con tu espalda de huesos y carne y calor
mientras bailo pesadamente con tu cuerpo que transporta,
el universo en cada rasgo molecular
al otro lado que es el mismo, así mismo el puente y la valsa y el cruzar
no podrás llevar una palabra, un aliento, poesía
todo es canción
aunque lo llamásemos prodigio
que cuerdas podríamos atar
hasta decir "vacío" es degradar la verdad
"un amor que no se ocupa de nadie"
recuerda Psique
y sin embargo
no esta de más sonreír tal vastedad inpronunciable
recondito recuerdo perene
sigamos con esta danza alegre
al día le sigue la noche
al sueño la vigilia
al nombre el silencio
y al olvido lo cierto.

domingo, 25 de marzo de 2018

Constante ingeniudad


Me río de mi ingenuidad
que al amanecer, con la frescura del nuevo día
repite oraciones convencida de su virtud 
que amerita la continuidad de sus días
de su forma tan elemental, tan básicamente insustancial.

Acercándose el ocaso 
cuando las luces matizan
con misterioso contraste 
los recuerdos 
facilitando un relieve engañoso a los momentos
se hace presente por segundos
el prodigio del engaño 
en que ha incurrido todo el día.

¡Vaya con la ingenuidad!
y su credulidad entusiasta de repetirse 
cada día
de no verse las grietas a razón del gesto reincidente del desencanto
al anochecer, 
cuando Morfeo susurra la verdad escondida
los sabios ríen doblados detrás de las cortinas de la escenificación

El comediante que reencarna cada mañana
para hacer que rían los santos 
hasta que el inconsciente actor
sale desnudo y miserable a dar las gracias por la lección.

Algún día será curtido y en la danza perderá los vestidos
la carne y el nombre, 
la materia y quizá la sed.

Ojos vacíos y desnudos reciben el aplauso
¡Por fin ha vencido!
y con el ultimo aliento toca una canción de despedida
siempre es bueno despedirse con una canción.

Yo también me río como los santos
como los sabios.
Sin virtud y sin sabiduría
no queda más que morirse de risa.