a quién he llamado sino a todos y cada uno,
encendiendo altares en la imaginación
ofreciendo un silencio y un canto
una cuerda que se quiere afinar cantando
por estar con todos celebrando
todos los vuelos que hemos realizado
y todos los milagros que hemos sido y seguiremos siendo
cada enjambre místico, una partícula del ser.
y lloro sino río
me desequilibra el mero concepto de la ausencia,
la dualidad, el terror
frágil y extático es ser humano
por eso vamos de la mañana a la noche
curtiendo en la repetición,
blandiendo el corazón
que es lo único que ser tan prodigioso puede blandir
a quién he de llamar sino a Dios que emana
de cada exhalación, mirada, tacto y agitación de alas
todo este asunto es entre tu y yo
¿Cuándo vienes a encender los altares?
ResponderEliminar¿Cuándo vuelves a compartir el fuego?
Hay ofrendas que nunca olvidan el momento
en que fueron partidos por el trueno
de tus ojos, de tus manos, de tus besos
Hay recuerdos que desgarran corazones
para llenar la tierra de ecos desangrantes
como ofrendas a una nueva primavera
Cada latido es un vaivén entre el vacío
oscuro y tú, luz y tiempo, espacio conjugado
amor eterno